sábado, 1 de octubre de 2016

El pensamiento renacentista y sus fuentes. De Paul Oskar Kristeller.












Con un cauto espíritu erudito, en este libro se manifiestan diversas preferencias en torno a los pensadores renacentistas. Ensayos escritos en contextos diferentes trazan las vicisitudes del pensamiento renacentista, y sus fuentes desde la antigüedad clásica hasta la Edad Media y desde el mundo bizantino hasta las líneas escolásticas y el humanismo más profundo. Este texto, también, da lugar a la importancia del aristotelismo renacentista y a la historia de las universidades italianas. Se unen las diferentes disciplinas -fuentes de la historia- en una empresa que busca una visión totalizadora del Renacimiento. 

El libro no está completo.


http://www.latinamericanhistory.net/kristeller-renacimiento.pdf


viernes, 30 de septiembre de 2016

Los asuntos de pareja. Por Pepa Sanchis.











Los asuntos de pareja

Ya abordé el tema de las sinastrías en otro artículo (Ver artículo).  Quería volver a abordar este asunto, pero introduciendo una parte técnica sobre la prognosis, para que se comprenda cuándo y cómo se activan las determinaciones natales.
La interpretación de cualquier asunto en la carta natal es bastante más complicado de lo que creen los astrólogos.  Cada casa astrológica abarca varios temas y no tiene un solo significador, sino bastantes.  Por ejemplo, la casa III nos describe varios temas: los hermanos, parientes cercanos, cursillos, vehículos, medios de comunicación etc.  Y esa casa III tendrá también varios planetas (significadores) relacionados de algún modo con ella. Cada uno de esos significadores nos muestra una faceta de ese poliedro que es nuestra experiencia vital en esa área.  Eso conforma un abanico muy amplio que iremos activando a lo largo de nuestra vida si vivimos lo suficiente para ello y los demás factores astrológicos contribuyen a hacerlo realidad.  No todo lo que hay en ese abanico se cumple, pues es como irse de viaje con una mochila: cuentas con todo lo que hay dentro, pero las circunstancias del viaje te harán utilizar unas cosas u otras. 
Ahora bien, en ese viaje sólo tendremos lo que llevábamos en la mochila y con ello tendremos que apañarnos. Por eso es conveniente aprender a conocer nuestro destino posible (el contenido de esa mochila), para saber cuál es la programación interior que seguimos. A lo largo de nuestra vida buscaremos activar esa programación interior, pero eso se puede hacer mejorándola o empeorándola. Y a menudo culparemos a los demás por estarnos dando algo que en realidad estaba en nosotros (la programación previa), no en ellos.  Por eso he desarrollado dos sinastrías, para que el lector entienda cómo funcionan y para que empiece a reflexionar sobre su propio bagaje, sacando las lecciones pertinentes.
Bajar artículo.


 http://www.bedaweb.com/verarticulo.php?nid=206






jueves, 29 de septiembre de 2016

Pedro Sánchez, 29.09.2016.










http://www.elperiodico.com/es/noticias/politica/dimite-mitad-ejecutiva-psoe-pedro-sanchez-5424945

Vamos a ver el tema de Pedro Sánchez a tenor de los últimos acontecimientos.








El Ascendente de Primarias acaba de entrar en Término de Marte y la Luna hace un sextil desde Virgo y casa V.

Tenemos a Marte en exilio conjunto al Ascendente,  Marte rige la casa XII, los enemigos ocultos y también la casa VII, los enemigos directos.

O sea que enemigos no le van a faltar al hombre.

Este Marte está apoyado por un sextil al Sol, lo que me parece poco refuerzo para superar este momento, aunque el Sol de Primarias se acerca al Ascendente y el Medio Cielo de Primarias se acerca al Sol.

Personalmente me encantaría que saliera reforzado de esta situación y quiero pensar que así será, aunque ahora mismo está contra las cuerdas.

Veamos su carta de Tránsitos.






Neptuno de Tránsito está sobre el Sol, y Urano de Tránsito sobre Venus en casa XII.

Sobre todo el Tránsito de Neptuno es significativo,  y me hace pensar en su posicionamiento dentro del partido cuyo ideario parece que se quiere acercar a un socialismo más " auténtico ", que es lo que le ha llevado a la situación en la que se encuentra.

Yo quiero que salga fortalecido de esta encrucijada, más que nada por el bien del país.


miércoles, 28 de septiembre de 2016

La Síntesis, el fundamento racional de la Astrología. Por David Bustamante.










 
David Bustamante Segovia. Bogotá (Colombia)
astrologiaracionalisima.blogspot.com
Lo que se entrega vulgarizado a la multitud, merece cualquier nombre, menos el de astrología. Dr. Adolfo Weiss (1888-1956).
Introducción
La astrología se originó en Mesopotamia hacia el 6.000 a. C. y pasó por las manos de babilonios y caldeos, griegos y romanos, cristianos y renacentistas. Aunque muchos fueron los pueblos que adaptaron una gran variedad de técnicas, nunca dejó de tener, no obstante, una base de fundamento científico y su ejercicio siempre dependió del más amplio conocimiento a la mayor profundidad posible. Desde un breve tiempo luego de la segunda Revolución Industrial (1914), sin embargo, no solo la astrología sino también otras disciplinas comenzaron a desnaturalizarse: la lógica de la producción en masa de la sociedad capitalista dio origen a la política de consumo que haría de todo un producto comerciable (la descomposición de las cosas es un síntoma característico de la producción masiva). Bajo este contexto histórico, el empresario y teósofo británico Alan Leo (1860-1917) contribuyó (¿bienintencionadamente?) al desprestigio de la disciplina. Con el fin o pretexto de hacerla más sencilla de entender para el alumno, la simplificó hasta tal punto que la redujo a un recetario difícilmente astrológico (e inviable o inútil en términos pedagógicos).
Cuando alguien nos pregunta cuál es nuestro signo, nos está preguntando sola y únicamente por la posición del Sol en el momento del nacimiento, es decir, por una ínfima parte de nuestro Mapa Natal. ¿Cuántas personas tienen su Sol en Aries o en Géminis o en Piscis? ¿Dos tercios de la población mundial? ¿Aplicaríamos las características de un signo a todos por igual? La astrología, en ese caso, no sería nada más que la relatividad de un capricho carente de ejemplo práctico (fuera de contexto).
La interpretación de un Mapa Natal en su integridad (no de modo fragmentado) se conoce como «síntesis astrológica». Quien primero insistió en ello fue el físico y astrólogo alemán Dr. Adolfo Weiss (1888-1956) inspirado en las enseñanzas del célebre astrólogo francés Jean-Baptiste Morin de Villefranche (médico y astrólogo personal del cardenal Richelieu en Francia en el siglo XVII; también autor del afamado tratado Astrologia Gallica). Las «recetas de cocina», sin embargo, son una prescripción de la que astrólogos e ingenuos andan de estómago lleno y es a la luz de este recetario astrológico que se forman hoy la inmensa mayoría de astrólogos: “El Sol en Casa 10 promete éxito”, “Marte en Casa 10 indica carrera militar”, “Un Ascendente en Piscis produce una personalidad depresiva”. En otras palabras, ‘dos más dos son cuatro’, sin advertir que hay otros valores o variables que se interponen en la ‘ecuación’ modificando, por lo mismo, el resultado. A esta complejidad tuvo que rehuir Alan para poder vender –y ejercer– la astrología.
La mentira
Una receta de cocina o una fórmula se define como una ecuación o regla o manera (fija) de establecer o concluir algo. En astrología, la interpretación o lectura de un Mapa Natal se rige, necesariamente, por lo que Adolfo Weiss decidió llamar (en su tratado Astrología Racional) la Síntesis. Además de la posición del Sol (signo solar) o de la Luna (signo lunar) están las posiciones (zodiacales) de Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón. A la lectura se sumarán también los «aspectos» (relaciones angulares) que los planetas forman entre sí (expresadas en grados y minutos). Luego: tras la posición celeste (zodíaco), se toma en consideración la posición terrestre, es decir, la posición de los planetas en las Casas (creadas por la rotación de la Tierra sobre su propio eje). Solo cuando tenemos un Mapa Natal compuesto de estos factores podemos darnos a la tarea de leerlo o interpretarlo, no antes. La interpretación, no obstante, tampoco debe ser fragmentada (o sería como leer un párrafo sin leer el capítulo o un capítulo sin leer el libro).
Si un planeta se ubica en Tauro, por ejemplo, la observación del regente natural de Tauro (Venus) se hace necesaria, pues es el planeta «dispositor», es decir, quien «dispone» del planeta que se halla en el signo natural de Venus (Tauro). Los cuerpos celestes guardan correspondencias con los signos y de ahí que al regente (planeta) natural de un signo en que se encuentra otro se le llame «dispositor». Marte en Géminis tiene como «dispositor» a Mercurio, así como Júpiter en Aries tiene como «dispositor» a Marte (etc.). Si el Sol se encuentra en Sagitario, debemos mirar, necesariamente, dónde se encuentra su «dispositor» (¿qué planeta ‘dispone de’ el Sol?): el regente natural de Sagitario, que es Júpiter. ¿Qué tal un Sol en Sagitario (signo de fuego) con su dispositor, Júpiter, en Capricornio (tierra) en Casa 6 (también de tierra)? Entonces las tendencias liberales o filosóficas del Sol podrían traducirse en conservadurismo o en pragmatismo, tanto como en una tendencia diplomática si Júpiter se encontrara en Libra, en literaria o periodística si se encontrara en Géminis, en deportiva o militar si en Aries y en espiritual o metafísica si en Escorpio o Piscis. Y, aun así, hemos de observar, a su vez, dónde se ubican los regentes naturales de Capricornio (Saturno), Libra (Venus), Géminis (Mercurio), Escorpio (Marte) o Neptuno (Piscis) sin descartar los «aspectos», las Casas y el Ascendente, etcétera. En fin, falta mucho por descubrir como para adelantarse tanto.
Es precisamente por el trabajo que cuesta hacer una observación de este talante la razón por la que muchos le rehuyen. Es, sin embargo, el único método exacto de lectura posible si con justeza queremos leer: hacerlo de modo fragmentado no refleja realidades, solamente prejuicios inamovibles.
Por esta y otras razones resulta vergonzoso leer libros de astrología con catálogos de ‘recetas’ o escuchar a astrólogos difundirlas como cosa concluyente. “Los arianos son activos”, “Los geminianos son inestables”, “Los piscianos son susceptibles”, suelen recetar. “Esto hace parte de la razón por la que a menudo se mira la astrología como un sistema de adivinación”, indica el astrólogo –y guionista– argentino Norberto Miguel García. La astrología no sería entonces la observación del firmamento (10 cuerpos celestes, sus relaciones angulares y las Casas en que se encuentran, etcétera) sino la de uno u otro planeta en un signo y, a encasillar a todo el mundo.
Desmitificando
A los fines de ilustrar el absurdo del recetario astrológico a la luz del cual muchos alumnos son formados, hagamos un ejercicio. Tenemos (en la hipótesis creada) a la Luna (emociones, afecto) en Escorpio (intensidad, agresión) en Casa 4 (raíces, hogar, madre). Al estar en Escorpio obtiene su peor «estado cósmico» (capacidad energética) pues es el signo de su «caída» (signo natural de la Casa 8 y de Plutón y de Marte).
No obstante (debido a que los signos se corresponden con los planetas que naturalmente los gobiernan) la configuración descrita a continuación auxilia o levanta a la Luna en caída: Mercurio se encuentra en el signo natural de la Luna (Cáncer) en trígono (con solo 1º de orbe) con la Luna, por lo que restablece, en gran parte, la capacidad energética de la Luna y, por lo mismo, aplaca sus impulsos agresivos evitando, por ejemplo, que la persona se torne rencorosa o posesiva: Mercurio (la razón) se impone sobre ella. También podríamos agregar que tanto la Luna como Mercurio reciben por parte de Júpiter (en Piscis en la Casa 8) un trígono (partil o exacto: 120º). Júpiter goza de un excelente estado cósmico, pues además de encontrarse en su signo natural (Piscis) también en una Casa de agua (uno de los elementos donde obtiene su fuerza mayor).
Goza así de una dignidad «esencial» y otra «accidental» (véase Dignidades esenciales y accidentales de los planetas). Es en este sentido que podemos decir con justeza que Júpiter dota de comprensión y sentido moral a Mercurio (regente del pensamiento) y de nobleza y devoción a la Luna (regente de los sentimientos), la que, a su vez, se halla tanto en su «decanato» (véase Los matices | El decanato, la duodenaria y el término) como en su Casa de residencia (Casa 4) constituyendo otra dignidad «accidental» en la configuración natal.
Lo mismo sucede si un Sol en Piscis (el peor escenario del Sol para brillar) tiene como «dispositor» a Júpiter (regente natural de Piscis) en Leo (signo natural del Sol) en Casa 5 (casa natural del Sol) o 10 (Casa natural de la profesión). ¿Qué tal si estuviera conjunto a Venus o si recibiera por parte de Venus y de Júpiter trígonos –partiles o no– desde Casas relativas al estatus social o económico? Entonces la ‘receta’ o fórmula que indica que un Sol en Piscis no triunfa no tiene veracidad alguna.
A propósito, el célebre escritor y eminente astrólogo británico del siglo XIX Walter Richard Gornold (Sepharial, 1864-1929), advierte en su libro Astrología | Cómo hacer y leer tu propio horóscopo:
Es imposible establecer de modo categórico los efectos que derivan de la posición de los planetas en las Casas, pues depende, en gran parte, de los signos en que se encuentran y los aspectos que forman con otros cuerpos celestes”.
De ahí que cualquier intento de establecer un juicio a la luz de una sola posición astronómica sea tan inútil como ingenuo.
Haciendo distinciones
Algunos objetan, por ejemplo: ¿entonces por qué Sagitario me caracteriza tanto, independientemente de dónde se encuentre el «dispositor» de mi Sol: Júpiter? La respuesta es una de las que siguen: (i) porque su Sol, además de estar en Sagitario también lo está en la Casa de Sagitario (Casa 9); (ii) porque allí donde está su Sol también se ubican otros cuerpos celestes (lo que se conoce como «stellium» o «conglomerado»); (iii) porque su Ascendente (o Signo Naciente) es el signo natural del Sol (Leo). En este último caso, el Sol sería su Regente Natal (se le llama así al regente natural del Signo Naciente o Ascendente).
Conclusión
Una receta de cocina ‘no hace un plato’ y mucho menos uno 'gourmet'. Las recetas de cocina sirven solamente a título informativo (teórico) nunca jamás a título interpretativo (práctico). Si queremos ser precisos –y responsables– al leer un Mapa Natal no podemos entregarnos a la mediocridad del recetario astrológico ampliamente promulgado por la inmensa mayoría de astrólogos y libros de astrología; y ni hablar de los horóscopos del periódico (lo que en la mañana del lunes aparece en Aries, en la mañana del martes aparece en Géminis). La «síntesis» constituye la pieza fundamental de la lectura astrológica.
Colofón
Hubo un tiempo en que los sabios astrólogos de la antigüedad –como Michel de Nötre-Dame (1503-1566) y Jean-Baptiste Morin de Villefranche (1583-1656)– no conocían de los astros generacionales Urano, Neptuno y Plutón (descubiertos en 1781, 1846 y 1930, respectivamente) y, pero aun: ¡sus lecturas no pudieron ser más precisas! Actualmente nos valemos no solo de los siete tradicionalmente conocidos y de los tres generacionales después descubiertos, sino también de Ceres, Palas, Juno, Vestas y Quirón. Si bien sirven para hacer algunas distinciones o precisiones, lo cierto es que no es nada distinto del uso y abuso de una calculadora para evadir hacer un razonamiento matemático. ¿Castrante, no? Lo es también el uso y abuso de docenas de astros en una Carta Natal. Quien se aferra a esta calculadora astronómica nunca aprende a auscultar las cosas; nunca se desarrollará la intuición lógica del intérprete, lector o astrólogo. A propósito, Norberto Miguel García sostiene:
No dudo que los asteroides pueden explicar algunas cosas. Pero si fuera ese el caso, ¿por qué ignorar los otros 6.399 asteroides? El hombre de la antigüedad le daba importancia a lo que veía y llegaba hasta Saturno. Nosotros, sin embargo, seguimos inventando supuestos efectos que siempre han estado en los siete tradicionalmente conocidos (Sol, Mercurio, Venus, Luna, Marte, Júpiter, Saturno). Lo que sucede, no obstante, es que necesitamos a ‘quién’ echarle la culpa de nuestra ignorancia y carencia de sensibilidad.
Hasta inventar astros –inexistentes– y responsabilizarlos por lo que se nos dé la gana está al alcance de la mano. Me consta: lo hice con una serie de asistentes en el Congreso Ibérico Internacional de Astrología de 1989. Por mi parte, me quedaré con los siete tradicionales –con doble regencia– junto a los tres generacionales luego descubiertos (Urano, Neptuno y Plutón)”.
He ahí la sagacidad perceptiva del intérprete.
Bibliografía sugerida:
1. Astrología Racional, del físico alemán Adolfo Weiss (Editorial KIER; 1977)
2. Manual de técnicas de síntesis astrológica: el camino en el Mapa Natal, del lingüista y guionista argentino Jerónimo Brignone (Editorial KIER, 2005).




martes, 27 de septiembre de 2016

Lo bueno, si breve, dos veces bueno ?. Una reflexión.













A mi me cansan bastante los estudios que se alargan sin fin, y mucho más cuando estamos tratando materias "densas ".

Por eso mis reflexiones suelen ser cortas, aunque creo que siempre subyace una idea interesante, o eso me gustaría a mi.

Acariciar una idea, saborearla y darle distintas formas, verla desde distintos ángulos, para que quizá se mueva un pequeño resorte dentro de ti que te incite al movimiento.....a la búsqueda.....a la constatación.

Me encanta la Filosofía y por eso debo ser raro, pero que bien me lo paso escribiendo.

Si alguien más disfruta con mis textos y mis elucubraciones, ya me doy por pagado.

Pero sobre todo intento ser breve y no acabar de decirlo todo, así las cosas el intercambio me parece más enriquecedor.







Felipe V.












https://es.wikipedia.org/wiki/Felipe_V_de_Espa%C3%B1a

http://www.abc.es/espana/20150219/abci-felipe-loco-bipolar-201502181847.html


La mañana del 4 de octubre de 1717, como si fuera una locura programada para estallar de golpe, Felipe V sufrió un ataque de histeria cuando salió a cabalgar: creía que el sol le atacaba. Aunque el carácter del primer Rey de la dinastía Borbón siempre había oscilado con preocupante rapidez de la euforia a la depresión, nada hacía prever el comportamiento extraño de aquel día. A partir de entonces, el Rey inició un lento viaje hacia la locura extrema

Vamos a ver como estaba su tema natal para ese día.






El Ascendente de Primarias está en Término de Júpiter y Saturno retrógrado le   hace una cuadratura.

Júpiter en la natal está en exilio y Saturno rige la casa III , la mente concreta.

Mercurio de Primarias se ubica sobre la Luna, estando ambos en exilio en el tema natal.

Luna rige la casa IX, la mente abstracta .

A su vez Mercurio y Júpiter, ambos en exilio en el tema natal.

Los graves problemas mentales que tuvo los señala la carta y se agravaron a partir de 1717.

Interesante leer el enlace que he colgado al respecto.


 

Ayurveda, el arte de vivir. Documental.











Os dejo este interesante documental.